Relatos 18
Me dijeron:
O te subes al carro
o tendrás que empujarlo.
Ni me subí ni lo empujé.
Me senté en la cuneta
y alrededor de mí,
a su debido tiempo.
brotaron las amapolas.
Gloria Fuertes
Relatos 17
¿Y si me caigo?
Ay cariño, pero, ¿y si vuelas?
Only the winds
Ólafur Arnalds
Relatos 16
Miraba al cielo y dejaba caer las estrellas: 1, 2, 14, 1 millón… Parecían caerle encima, dispuestas a quemarla. Una vez alargó el brazo para coger una, tan cerca la veía, pero el resplandor se apagó en su mano, se apagó en la Vía Lactea.
[…]
No caerán estrellas al alcance de tu mano.
Oso – Marian Engels
Recitales 8
No solo la poesía es poesía.
La poesía son fábricas abandonadas, la hierba saliendo entre los adoquines, la inmensidad del desierto y el vacío del cielo.
La poesía es despertar con el canto de los pájaros, es el ronroneo de mi gata mientras no me deja dormir y es el cariño y la risa despreocupada de aquel perro vagabundo.
La poesía es la Noche Estrellada de Van Gogh, el Beso de Gustav Klimt y el Jardín de las Delicias del Bosco.
La poesía son los detalles de Hitchcock, los 400 golpes de Truffaut, los silencios del Bergman y los paisajes del cine italiano.
Pero también son poesía las madres con doble jornada, las mujeres no escuchadas y las ningunedadas.
También son poesía el cariño de nuestras abuelas, las arrugas de quien tiene todo el peso del tiempo a sus espaldas y la lucha diaria e invisible de todas ellas
Porque todo el trabajo de cuidados afectivos y personales es también poesía. Por ellas, que luchan cada día contra todas las dificultades del mundo y además contra la falta de reconocimiento por ser mujeres. Que no hay mayor poesía que mantener el mundo a flote.
Por ellas, que viva la poesía.
Dubhe
Recitales 7
Caricias
susurros
vellos de punta
esa sonrisa, entrada al paraíso
mirada incandescente, esos ojos que son hogar
cuidados, anhelos de un futuro mejor
viajes a la playa que nunca hicimos, revolcarnos por la arena de nuestros sueños
paseos interminables
tardes de cine, ver los créditos hasta el final
jugar mientras cocinamos o bajo las sábanas
las vueltas que me dabas en la vida
todo el cariño que desbordabas
el primer te quiero y los últimos
leernos poesía y cantarle en silencio a las estrellas.
Dubhe
Recitales 6
Bendita estrella del norte que me rodeas con tus brazos y me acaricias en las noches de vigilia.
Cuando el resto calla tú siempre estás ahí, con tu perenne abrazo y perfecto sosiego.
Solo tú entre tantas iguales te mantienes firme y segura para mostrarnos el camino.
Porque en el océano de la perfección tú eres la diferente, la que lucha contra la eterna e implacable corriente del universo.
La que pese a todo lo que pueda pasar, siempre estás ahí señalando el norte, el del mundo y el mío.
Dubhe
Recitales 5
Te recuerdo en cada uno de los besos del metro, en cada roce de manos accidental y en cada abrazo desmedido.
Te recuerdo en cada guiño de ojos, en cada mirada brillante y en cada sonrisa de esperanza.
Te recuerdo en cada persona que llora a escondidas entre vagones, en cada grito de agobio y en cada suspiro de alivio
Te recuerdo en cada una de las películas que vimos, en cada una de las fotos que nos hicimos y cada una de las veces que nos caimos para volver a levantarnos.
Te recuerdo en cada reencuentro afortunado y en cada final sin despedida. En cada momento de felicidad de los últimos años pero también, en los últimos meses, en los más amargos.
Te recuerdo a todas horas. Y, pese a que muchas veces dudo de si tienen más peso los recuerdos que duelen que los alegres, siempre termino llegando al mismo punto y es que todos esos recuerdos me ayudan a conocerme mejor y a sanarme por dentro.
Así que por todo lo disfrutado, por todo lo sufrido, por todo lo amado y por todo lo vivido, te quiero, te quiero seguir recordando.
Dubhe